viernes, 29 de junio de 2012

La belleza es efímera

Era el mejor candidato. Un cuerpo envidiable, una sonrisa arrebatadora, unos ojos cautivadores y una labia que encantaba hasta las serpientes. No tenía rival. Todos los sabían. Cuando llegó el día de la final, se pavoneó por la pasarela convencido de que todos caerían a sus pies obnubilados. Se acercó al pie de la tarima a recoger una rosa con la mejor de sus sonrisas. En ese preciso instante, un foco que bajaba a una velocidad vertiginosa, le partió la cabeza en dos. ¡Qué efímera es la belleza!

viernes, 22 de junio de 2012

Siempre en Carnaval

Ella sabía donde encontrarlo, en el número trece, como todos los carnavales. Se disfrazó de bruja, cogió un taxi y se plantó en Santa Catalina de madrugada. Se dirigió al chiringuito y pidió un refresco. Al verlo ella le sonrió y le envió un beso. Él se acercó sin reconocerla, hablaron y luego bailaron. Ella volvió a sentirlo como lo había sentido en otra época; su olor, sus manos, sus caricias y sus besos seguían siendo los mismos, no habían cambiado. Buscaron las calles oscuras y se perdieron en el frenesí de sus cuerpos. Ella Jamás había podido olvidarlo.

viernes, 15 de junio de 2012

Las carcajadas de Martín

Cada noche oía aquellas carcajadas que le martilleaban la cabeza y le impedían dormir. Una noche saltó de la cama y subió. Tocó en la puerta pero nadie contestó, solo oyó la estridente carcajada. Aporreó la puerta, con rabia, hasta que la vecina de enfrente abrió y le dijo apesadumbrada:

-No insista, ahí hace años que no vive nadie.

-¿No?, ¿y las carcajadas que oigo todas las noches?

-Usted hace unos días que vive aquí, ya se acostumbrará. Yo llevo oyendo esas risas desde que Martín, el payaso, murió. Ya sabe, los fantasmas son así.

viernes, 8 de junio de 2012

PACTO DE AMOR

Frente al mar y con apenas veinte años, habían firmado un pacto: amarse toda la vida. Ahora, después de treinta años, querían volver a reeditarlo, como lo habían hecho antaño, pero el amor se les había acabado.

viernes, 1 de junio de 2012

El fondo

El fondo, siempre estaba el fondo, nunca conoció otra cosa, que el fondo. Se levantaba y volvía a caer, pero el siempre se incorporaba, por que en la vida, si te rindes, te terminan comiendo las moscas, pensaba. Cada noche se acostaba entre sus cartones viejos, entre sus ilusiones de cambio, entre sus neuras cotidianas, con la sana esperanza de que un día, la suerte le diera una palmadita en la espalda y enterrar para siempre la crisis que había sido toda su vida.